sábado, junio 03, 2006

Mala Idea!

Creo que realmente la cague con ir a meterme al centro (de Santiago). A eso de las 4 de la tarde quedé desocupado, y no se me ocurrió nada mejor que ir a comprar unos chiches que necesitaba al Paseo Ahumada. No se en que volá me fui, pero se me olvidó por completo que estaba quedando la grande con los estudiantes, pese a que en la tele pasan a cada rato los inoportunos “extras”, que cortan en lo mejor la programación, además de ver todo el día la plaga de carteles rayados con lápiz pasta y pancartas hechas en ese papel café de envolver, con que los estudiantes de educación superior tapizan el Barrio Universitario en apoyo a los pingüinos.

Ya estando arriba del metro, y mientras sacaba los audífonos de la mochila, me puse a sumar cuanto debía en las casas comerciales. En ese instante, los números se me fueron a la chuña, porque en las cercanías de la estación Moneda, me empezó una tos media carraspeada. Yo aun sin pegarme el alcachofazo de lo que pasaba, pensé y dije: ¡pucha que lata, me voy a resfriar! Anotación mental: comprar aspirinas.

Ya cuando la maquinista anunció por los parlantes, que nos aproximábamos a la estación Universidad de Chile, me cayó la teja de una, ¡uhhh las protestas!

Al bajar y después de lanzar unos pequeños exabruptos al gas, dije ya estoy acá y no me puedo devolver, así que apechugue y camine nomá. Ya en los pasillos de la estación iba con los ojos llorosos y la garganta apretada. Fue una sensación súper rara, parecía que me hubiera tragado un puñado de hormigas envueltas en un chicle gigante, y ya me estaba desesperando con el ahogo. Lo único que atine hacer fue comprarme una bebida en un local de la estación. Tenía muchas ganas de tomar una Coca Cola, pero tuve una idea brillante y me dije: voy a comprar una Limón Soda, porque tiene limón y con eso contrarresto el efecto del gas lacrimógeno. Jajajaja, que estupidez!. Después cuando me la estaba tomando y no me pasaba nada, me di cuenta que de limón tenia el puro olor nomá.

Mientras subía por la escalera mecánica que da al Paseo Ahumada, me puse a pensar, y me dije: he subido mil veces esta escalera… pero esta vez no era como siempre. Ahora tenia un significado diferente, porque pronto seria participe de una mini guerra civil, entre estudiantes y Carabineros.

Ya estando arriba, di un vistazo antes de empezar a caminar y algo me pareció raro. Había mucha gente paseando como si nada hubiese pasado, es más, hasta estaban los típicos vendedores ambulantes, comercializando sus cosas a plena vista y paciencia de los policías. Algunos de ellos eran tan patudos que estaban con mascarillas antigas, y aun así gritaban y ofrecían los libros y discos pirateados.

Después de esa observación y sintiéndome un poco más aliviado de mi ahogo, me dirigí a lo que vine. Me fui vitrineando y bebiendo mi Limón Soda, cuando de repente veo que viene una turba de chiquillas escolares, y yo me dije: bueno me voy a hacer a un lado para que pasen, y me corrí… pero ellas hicieron lo mismo. Caspitas!!! Se me vino a la cabeza lo galán que soy (ya oye!), y además recordé que me había echado “Axe Click”… pensé en ese instante: Oh mi God!!! El efecto Axe si funciona!

Después del manso rollo que me había pasado, me di cuenta que no me querían por mi atractivo físico, sino por las monedas que traía en mi bolsillo. Una de ellas se me acercó, estiró su brazo y me dijo: “oye loco, rájate con una monea, pa’ paliar la olla”, mientras agitaba un tarrito de nescafe. Ohhh la mina flaite! me dije, y le pasé rápidamente una moneda de $50, para intentar ocultar la risa.

Pasada esa ocurrencia, llegué donde me dirigía y compré los cordones negros que quería. Me puse a conversar un rato con el vendedor y en eso salió el tema del flaite que habían linchado los estudiantes, por estar colgando en la protesta. Cuando la cháchara se estaba poniendo entretenida, nos empezó a picar la garganta con los malditos gases que estaban tirando los pacos. Pensé que hago, y se me ocurrió una excelente idea. Ya que estaba en el Paseo Ahumada, no podía dejar de pasar a los Diana. Que mejor, para un videojuegomaniaco, dejar el s3 de la protesta y cambiar el toxico olor del gas, por el aire acondicionado y limpio de los Diana. Ni tonto!